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Indicaciones para la posible corrección de las anomalías de malformaciones o deformaciones del pie.
Para corregir el pie valgus calcáneo, elevamos y prolongamos hacia delante el borde interno del tacón, aunque esta solución solo se emplee temporalmente y no solucione del todo el problema del pie plano.
Para corregir el pie valgus calcáneo, elevamos y prolongamos hacia delante el borde interno del tacón, aunque esta solución solo se emplee temporalmente y no solucione del todo el problema del pie plano.
Respecto a la corrección del pie varus calcáneo, se realiza haciendo desbordar el tacón de 5 a 10 mm. por fuera del empeine, elevando también el borde interno prolongado hacia delante y combinado con el empleo de una plantilla.
La corrección del pie plano valgus, se realiza elevando el borde interno del tacón y colocando debajo del antepie, una pequeña prótesis en forma de gajo, el borde externo se coloca por debajo del cuarto metatarsiano y tiene de 3 a 5 mm. más de espesor que el borde interno. También se puede colocar una cuña supinadora en el tacón y una plataforma o cuña pronadora bajo el antepié.
Para corregir el píe cavo, se realiza de diferentes formas: según Thomas, eleva los dos tercios posteriores del metatarso por medio de una barra, cuyo borde anterior sigue la cabeza de los metatarsianos.
Según Lewin, sustituye la barra de Thomas, por una media luna de un material semirígido como el caucho o un elastómero, evitando de esta forma el apoyo sobre las zonas dolorosas. Cuando sea aconsejable, por el tipo de defecto que requiera una aplicación menor de la prótesis, se puede colocar la barra en el interior del calzado, lo que resulta mucho más estético.
Uno de los problemas de la aplicación de los correctores externos, es que con el uso del zapato desaparecen, de ahí que sea más aconsejable el empleo de plantillas interiores, cuando esto sea posible.
Los llamados soportes ortopédicos pueden en sí mismo suponer un alivio para una persona que tenga una deformación menor, pero solamente como paso a un soporte más estudiado y particularizado en la afección concreta. De la misma forma que no es posible emplear una sola dentadura postiza para todas las encías, tampoco pueden resolverse los problemas con un único soporte ortopédico. El soporte debe estar construido con un molde del pie extraído en postura normal.
Un soporte, en muchos casos, puede no ser indispensable y por sí solo no constituye un tratamiento, se trata de un auxiliar. Los soportes deben fabricarse en materiales tales como el cuero, corcho, madera, duraluminio, plástico o celuloide.
• Zapatos empleados en grandes deformaciones