Nació en Cerdeña en 1943, en el seno de una familia muy pobre. Su infancia fue muy difícil, tuvo que desempeñar trabajos muy duros y, poco antes de iniciar su adolescencia, su inusual fortaleza física llamó la atención del dueño de un gimnasio, quien le convenció para que se hiciera boxeador.
En ese deporte Columbu obtuvo una sucesión ininterrumpida de victorias. Pero el boxeo aficionado no deja dinero y el muchacho tuvo que emigrar a Alemania. Allí tuvo la suerte de encontrarse con Schwarzenegger, quien le aseguró que lo suyo se encontraba en el terreno de las pesas. Columbu le hizo caso. Obtuvo el campeonato mundial de Londres en 1968 y, muy poco antes, el titulo europeo de levantamiento de pesos. Era el culturista más fuerte y también el más musculado. Compensaba su 1,60 metros de estatura con unas proporciones hercúleas y una estriación pectoral como nunca se habían visto. América lo llamó y hacia allá se fue junto con su amigo Arnold. Ganó dos campeonatos mundiales y el título de "más musculado" numerosas veces. Probó fortuna en el Olimpia y consiguió ganarlo en dos ocasiones, a pesar de su reducida estatura. Hombre inteligente y de gran sentido comercial, hizo una fortuna vendiendo sus cursos de desarrollo muscular por correspondencia, haciendo seminarios y exhibiciones y doctorándose, finalmente, en quiropráctica, una especialidad en la que es hoy uno de los más destacados. Su clínica de rehabilitación y acondicionamiento físico está entre las más concurridas del país y, aparte de eso, se dedica a preparar físicamente a personajes célebres del cine, la televisión, las artes y las finanzas. Sus honorarios son altos, pues llega a cobrar más de un millón de pesetas al mes por sus clases privadas. Columbu es el responsable de la increíble transformación de Sylvester Stallone y su asesor deportivo.