Vitaminas solubles en agua. El grupo de la vitamina B
Como dijimos con anterioridad, las vitaminas solubles en el agua no son tóxicas, a menos que rebasemos los requerimientos diarios con cantidades varios centenares de veces mayores.
Tampoco suelen almacenarse en el cuerpo, por lo que es necesario tomarlas todos los días. Hoy pasamos revista a la sumamente importante vitamina B -excepto sus cofactores-, un grupo de sustancias que, en su conjunto, quizá sean las más capitales para el cuerpo humano, habida cuenta de su diversidad.
Vitamina B1, o tiamina, se encuentra en grandes concentraciones en la cáscara de los cereales, la levadura y, en menor cantidad, en la carne. Esta vitamina forma parte del sistema encimático que permite convertirse a los carbohidratos en energía utilizable. Es particularmente importante para el buen funcionamiento del sistema nervioso. La falta de esta vitamina produce el beriberi, que afecta al corazón, al sistema nervioso o produce hinchazón en los tejidos -edema-. Los alcohólicos tienen siempre deficiencias de vitamina B1. Las necesidades diarias de tiamina dependen de la cantidad de carbohidratos -y su cualidad natural- consumida en la dieta.
Vitamina B2, o riboflavina, es un pigmento amarillo brillante que se encuentra en el hígado, otros tejidos animales y las levaduras. Su deficiencia produce inflamación de la lengua y grietas en los bordes de la boca, y no suele aparecer sola sino en concomitancia con otras enfermedades de carencia, como la pelagra y el beriberi.
Vitamina B3 o niacina, se encuentra en las levaduras y en diversos tipos de carnes. Se convierte en el cuerpo en coencima, que facilita numerosas reacciones químicas. El cuerpo humano puede producir niacina a través del triptófano, uno de los aminoácidos de los alimentos proteicos -se encuentra en los productos lácteos-. La deficiencia de niacina resulta en pelagra, una enfermedad grave señalada por erupciones de la piel, problemas digestivos y trastornos mentales. Su ingestión excesiva puede producir enrojecimientos súbitos, y algunos grupos de investigación la consideran la vitamina "milagro" , asegurando que su consumo cotidiano y en altas dosis libera de las radiaciones atómicas y potencia enormemente la capacidad mental y volitiva. Otros, sin embargo, aseguran que tales ingestiones pueden ser peligrosas para la salud.
Vitamina B5, o ácido pantoténico. Se encuentra en las yemas de huevo, hígado, riñones, vegetales, levaduras, leche y semillas. Es una de las más abundantes entre el grupo de las B, y es importante para la producción de energía y la síntesis de diversas hormonas. Deficiencias experimentales provocadas en los animales les han producido encanecimiento del pelo, hemorragias y trastornos de la piel. Su ingestión excesiva puede provocar diarreas.
Vitamina B6, o piridoxina. Abunda en el hígado, las levaduras, numerosas plantas y en el pescado. Es una coencima esencial, que toma parte en reacciones que implican a ciertos aminoácidos -los "ladrillos" de la proteína- y ácidos grasos. Es raro que se presente una deficiencia de piridoxina en el ser humano, lo mismo que su toxicidad.
Vitamina B12 o cianobalamina. Se acumula en cantidades considerables en el hígado humano y es necesaria para la producción del DNA, un componente esencial de los núcleos de las células. Su deficiencia produce anemia perniciosa, una enfermedad caracterizada por la degeneración del tejido nervioso. Sus enfermos carecen del "factor intrínseco esencial", que normalmente lo produce el estómago y es esencial para la absorción de la vitamina B12. En estos casos, los pacientes deben recibir dosis extra de cianocobalamina, que no se necesita en personas normales, ya que, según se ha demostrado, su acumulación en el hígado puede durar unos cuantos años.
RESUMEN
Vitamina B1: Se encuentra en: levaduras y cereales integrales. Es importante para el sistema nervioso. Su carencia produce beriberi y trastornos mentales.
Vitamina B2: Se encuentra en hígado y levaduras. Es importante para la salud general. Su carencia produce inflamaciones bucales.
Vitamina B3: Se encuentra en levaduras y carnes. Es importante para diversas reacciones químicas. Su carencia produce pelagra, trastornos digestivos y mentales.
Vitamina B5: Se encuentra en yemas de huevo, visceras, leche y vegetales. Es importante para producción de energía y síntesis de hormonas. Su carencia produce hemorragias y trastornos de la piel (experimentalmente).
Vitamina B12: Se encuentra en alimentos que contengan cobalto. Es importante para producción del DNA. Su carencia produce anemia.